Ayer finalizó la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) Panamá 2019, por lo que El Preguntón recurrió al arzobispo José Domingo Ulloa Mendieta, quien además es el presidente del Comité Organizador Local, para conocer de viva voz sus impresiones del evento más multitudinario del planeta, superado solo por el mundial de fútbol de la FIFA.
¿Qué deja la JMJ?
'Lo que va a dejar es la semilla de la transformación del mundo que viene en manos de los jóvenes, que merecen y exigen su espacio, que son nuestra fe y esperanza del futuro'.
¿Qué les diría a quienes dudaron y cuestionaron este emblemático evento?
'Yo siempre creí en la capacidad de los panameños, que hablamos mucho, pero al final nos unimos cuando son proyectos de país. Esta fue una gran oportunidad; Panamá está en la mirada del mundo entero'.
Para usted, ¿cuál fue el gran fruto de la jornada?
'El gran fruto de la jornada está en no solo poder recibir a los miles de peregrinos, sino que pueda surgir lo mejor que hay en el fondo de los panameños y que cada peregrino que nos visita realmente pueda llevarse esa imagen de lo que verdaderamente es Panamá'.
¿Y como pueblo?
'También es la oportunidad para ir descubriendo todos los talentos que tenemos y decir lo hemos podido hacer y lo hemos podido hacer los panameños'.
La llegada de estos jóvenes además inyectó al país de una alegría contagiosa en un momento tan necesario, ante las situaciones que vivimos.
'Sí, yo creo en la providencia de Dios, algo que no me canso de decirlo. Yo creo que uno de los grandes males de los panameños es la negatividad y baja autoestima y esta jornada vino a demostrar todo lo contrario. La gente nos mira y se admira de lo que nosotros somos. Debemos ponderar lo bueno, lo hermoso de este pequeño país con su problemática, sí, pero un país en el que si todos nos unimos podemos realizar grandes cosas'.
Panamá también marcó otro precedente con la primera llegada de un Papa latinoamericano a la región de Centroamérica.
'Esto es maravilloso, esto es historia universal, historia de la Iglesia. Primer Papa latinoamericano, un Papa que vino a hablarnos con los gestos y los lenguajes de Latinoamérica y vino a visitar esta región centroamericana que tanto necesita de la presencia y mensaje de Francisco'.
La jornada en la región era una necesidad conocida por el papa Francisco.
'Sobre todo en las circunstancias que vivimos de migración, de muchos jóvenes que caen en bandas delincuenciales, narcotráfico y donde la mayoría son jóvenes que no podemos olvidar. El alto porcentaje de la población de Centroamérica es joven y juventud es signo de esperanza y sabemos que esta es la semilla que esta jornada va a sembrar en los miles de jóvenes que vienen del mundo entero, y especialmente de esta región centroamericana'.
Esta es una oportunidad valiosa de ser escuchados los jóvenes de la región.
'Yo creo que es la gran oportunidad que se tiene frente al Papa y frente a los adultos. Nos toca ahora a nosotros dejarles los espacios. La transformación del mundo, la transformación de Centroamérica y la transformación de Panamá solo puede venir a través de jóvenes y esto lo debemos entender los adultos que no hemos hecho el papel que nos corresponde; le hemos estado legando un mundo dañado, corrupto de injusticia y el joven aspira a algo, pero hay que darle oportunidades y yo creo que es el momento de dejar en manos de los jóvenes que puedan transformar esta realidad'.
Perfil
- José Domingo Ulloa Mendieta, arzobispo metropolitano de Panamá y presidente de la Conferencia Episcopal Panameña.
- Nació el 24 de diciembre de 1956 en Chitré, provincia de Herrera (edad 62 años).
- Fue ordenado sacerdote el 17 de diciembre de 1983 por el entonces obispo de Chitré, Mons. José María Carrizo Villarreal, en la Catedral San Juan Bautista de Chitré.
Por: Carlos Ávila | Mi Diario